Ayer, miércoles, después de su presentación en Pamplona, Logroño y otras localidades, se presentó por fin en Zaragoza la novela de nuestro amigo Javier Iribarren. Pasamos un buen rato de charla y conversación y, desde aquí, sólo me queda agradecer la presencia de los que allí estuvistéis y de los que queríais estar y no os fue posible. Os dejo abajo la crítica que en su día colgué en el blog Lecturas hispánicas.
Una buena novela, muy por encima de la media de lo que se está publicando. Calidad literaria, testimonio, crítica, amor y humor, de la mano de un autor con talento y oficio.
Procuré retomar el ritmo de estudio, por enésima vez, aunque no fue sencillo. Tal vez convenga precisar aquí al lector que aunque no lo parezca el relato avanza, y hacia delante. Las correrías de un opositor no encierran asesinatos junto al lago, leyendas templarias ni secretos vaticanos. Es probable que no haya ni sexo. Auguro que no habrá película. (de "Interino". Javier Iribarren.Ediciones Eunate. Pamplona, 2014).
Pues no, no es cierto. Porque en "Interino" sí que hay película. Javier Iribarren nos presenta una apasionante novela de amor, humor y crítica social, que destapa los padecimientos y hasta los peores instintos humanos ante la lucha diaria por la supervivencia, y cómo esa lucha puede convertirse en una verdadera trampa. Su lectura suscita multitud de interrogantes, pero quizá el principal consista en cuestionar nuestras propias ambiciones: la naturaleza de las mismas y sus efectos, su legitimidad y, en todo caso, su verdadera conveniencia (su oportunidad). Buen punto de partida para una profunda reflexión sobre lo que la sociedad espera de nuestros jóvenes y ellos de la sociedad.
Estamos ante el crudo testimonio del suplicio padecido por esta juventud condenada al fracaso escolar o a discurrir por un eterno laberinto implacable y desesperanzado de estudio, disciplina y pobreza, difícilmente compatibles con la mínima estabilidad física y emocional que cualquier tipo de proyecto vital precisa. Panorama sólo roto por algún que otro escarceo casi siempre condenado al fracaso, bien sea por el extranjero (Londres, en este caso) para intentar buscar salidas y, de paso, aprender o perfeccionar otro idioma; bien por los bosques de una administración efímera, transitoria y provisional. Estudiante, opositor o interino, qué más da: la angustia es extrapolable a cualquier otra situación en que se hallan inmersos los jóvenes de hoy. Y este es el testimonio y esta la odisea: un relato verdaderamente dramático. ¿Cómo que no hay película?
Y ya, en la perspectiva puramente formal o literaria, nos encontramos con una prosa exenta de experimentos lingüísticos o expresivos o de pretensiones líricas o poéticas, pero rigurosa y eficaz; de hecho, la narración mantiene un ritmo muy bueno con dosis, si no de un suspense hitchcockiano (inapropiado por lo demás para el género), sí de la necesaria tensión para atrapar la atención del lector, aderezada además con pinceladas -ahí sí- de un lirismo nada pacato (y por tanto acorde con el tono narrativo) pero muy emotivo y salpicado de un humor muchas veces fino e inteligente. La trama está perfectamente estructurada y los personajes acertadamente definidos, lo que unido a ese logrado ritmo hacen de "Interino" una novela muy por encima de la mediocridad a la que nos tiene acostumbrados el actual mercado literario .
Recomiendo, pues, su lectura: es interesante, emocionante, divertida y motivadora. Pero, además, lo dicho: contiene un vivo testimonio de nuestra época. Bueno, hoy, para la reflexión y, mañana, para el recuerdo aleccionador.
Servando Gotor
Enhorabuena a los dos, una presentación en Zaragoza era necesaria y conveniente,
ResponderEliminarcamino de ciudades quizá mayores, pero no más dignas, donde tal vez hablen ese
extraño idioma que llaman inglés, pero que no alcanza al castellano.
Soy de los que querría haber estado pero no pudo ser: con todo, me queda
la presentación de las próximas novelas: a Interino puede seguirle Exterino,
o Interina: ahí estaré sin falta y sin duda.
Gracias por hacernos participar del evento como si fuéramos
de casa 8-)
Un abrazo
Narciso
D.Nar, le hubiera gustado la presentación. Estuvo muy interesante! Presentador y autor formaban un buen tándem.
EliminarLa Conchaparis
Conceta¡¡¡ ya me los imagino, la afoto lo dice todo. Claro que el
ResponderEliminarMaestro Gotor está rejuvenecido y Javier se ha tenido que poner
-ya tan joven- unos gafones de intelectual que parece Dámaso (por
Alonso).
Están como en su salsa de cada uno con el otro, si fueran otros tiempos
creo que podrían ir presentando el libro por provincias. Qué maravilla¡
Un abrazo, Conce, cuánto tiempo.
Narciso
Hola a todos, fue un placer inmenso estar en Zaragoza y con vosotros (Servando, Concha, Mercedes y resto de amigos de Servando, el auténtico movilizador de tanta gente). Fue una tarde muy agradable y me sentí muy cómodo. Espero que nos veamos pronto.
EliminarUn abrazo
Javier
Pues yo apunto la novela para las Navidades. La regalaré. Enhorabuena. Un abrazo.
ResponderEliminarEnhora buena Javier. No pude ir pero me alegré mucho por ti.
ResponderEliminarla leeré, puedes estar seguro
un abrazo
Ángel