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Wo ist der Schnee vom vergangenen Jahr? (Bertolt Brecht)
Mais où sont les neiges d'antan! (F. Villon)
¿Dónde están las nieves de antaño?
Penetré en el apartamento situado en el señorial edificio aunque algo tronado, de estilo de principios del pasado siglo. En sus amplios espacios de altos techos y antiguos muebles de nobles maderas se había remansado el tiempo. Tuve la sensación de ingresar en un lugar de una época ya abolida, preservada dentro de una ampolla de cristal, quizá el palacio de la bella durmiente, donde todo se había detenido en un momento olvidado, pero también, como si estuviera violando un recinto clausurado donde se guardaba la intimidad de la vieja dama que lo había habitado hasta su reciente muerte. Me habían encomendado el inventario del ajuar para formar su testamentaría.
Entre los numerosos objetos que iba numerando y anotando en el cuaderno le llegó el turno a un mazo de cartas atadas con la inevitable cinta de seda ajada y descolorida por el tiempo. No tenía duda alguna de que se trataban de cartas de un antiguo amor, no realizado, pues su propietaria permaneció soltera toda su vida. Cartas guardadas durante todo el tiempo como si de alhajas de se tratara No tenía ningún derecho, ni obligación, de leer esa correspondencia privada, pero tampoco ningún interés en hacerlo, sin embargo, quitando el polvo de un sillón me senté para un tranquilo examen. La cuidada caligrafía denotaba una buena educación del joven escritor. Enviadas hacía medio siglo desde distintas poblaciones europeas su contenido era de una deliciosa vulgaridad, transcribían todos los tópicos, que cuando los hemos dicho nosotros nos han parecido sublimes, dedicados siempre por cualquier amante a su novia. Mecánicamente y con una de esas cartas en la mano conecté un viejo aparato de radio, de aquellos que funcionaban con lámparas, y mientras leía escuché la voz antigua de un locutor que en trasnochado estilo presentaba un programa de discos dedicados. “… para Julita de su enamorado, que ella ya sabe,….. para todos ellos: Dos gardenias de Antonio Machín… “
Antonio Envid
Me ha gustado mucho. Cuando te pones en plan sencillo eres muy ameno. Y el final es perfecto. Mi madre me cantaba canciones de Machín de pequeña y yo estaba embelesada. también cuando lo escuchaba a él. Tenía una voz muy apta para niños pequeños.
ResponderEliminargracias, estaría muy bien que continuase la historia.
salud!
Vlad
Me alegro de que te haya gustado, estimada Vlad, contar con lectores tan sensibles como tú es un privilegio, pero también un reto dificil.
ResponderEliminarQuizá fuera un buen arranque para un relato de relismo mágico. Quizá lo escriba cuando sea mayor. Un cariñoso saludo.
Antonio
Pa l'ante como dicen en mi pueblo...
ResponderEliminarBernardo
Yo pienso que es un buen arranque para cualquier tipo de novela. <Un relato de suspense sería una posibilidad. No me preguntes por qué pero creo que serías un gran escritor de intriga. No lo considero un género menor.
ResponderEliminarGracias
Salud!
Vlad
Vlad
Me parece que no quedaremos con la duda de si podía haber sido un escritor de intriga. No es un género menor, desde luego, precisa de una gran capacidad de análisis sicológico. El género negro me fascina, Raymond Chandler es mi favorito, pero también Andreu y Lobo Antunes tiene una novela sobre el secuestro y muerte de un general postugues que se puede encuadrar en el género.... en fin, cómo pretender estar a esa altura. No obstante gracias por tu estímulo, ya digo, cuando sea mayor, ya veremos.
ResponderEliminarsaludos Vlad
Antonio