SALUDANDO EL COMIENZO DE LA PRIMA-VERA DESDE EL SANTUARIO DE SEGEDA (Antonio Envid)

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Devotamente hemos peregrinado al santuario de Segeda para despedir al Sol en su espléndido equinoccio el primer día de esta primavera. Los idus de marzo nos sean propicios. Tras las rituales libaciones y mientras el Dios Sol se retiraba por el cerro de Valdehornos le hemos rogado que en su viaje por la cara oscura destruya nuestros pecados y nos reconforte para soportar los tiempos convulsos que estamos viviendo. Tal como hicieran nuestros antepasados ante el temor de un ataque próximo de Roma. Al fin, cayendo la noche nos hemos retirado alegres al comprobar, una vez más, que tras el invierno llega la primavera.

En el término de Mara, comarca de Calatayud, se encuentran las ruinas de la que fue la ciudad mas importante de los belos, tribu de celtíberos que señoreaban la comarca. Los belos confederados con los arévacos de Numancia hicieron frente a Roma en su conquista de la Celtiberia. Los romanos cambiaron su calendario el año 134 a. C. adelantando su comienzo al uno de enero (hasta entonces empezaba en marzo) para poder anticipar el nombramiento de Publio Cornelio Escipción Emiliano como comandante de las tropas destinadas a aplastar la rebeldía de Segeda y dotarle de medios.

Foto: La plataforma celtibérica de Segeda,
con los movimientos astronómicos del sol y la luna. © UNIZAR
(Extraída del blog Terrae Antiquae)

Lo más asombroso de Segeda ha sido el descubrimiento hace unos años por investigadores de la Universidad de Zaragoza de una plataforma de piedra de traza trapezoidal que cumplía funciones de observatorio astronómico y santuario de adoración al sol. “Este hallazgo ha sido posible gracias a los estudios arqueoastronómicos que se están aplicando desde hace apenas unos meses, y que demuestran que la sociedad celtibérica de Segeda (Calatayud) contaba con altos conocimientos geométricos y astronómicos, ya que resolvieron en una construcción compleja y horizontal, los cálculos anuales del movimiento del sol (solsticio y equinoccio) y los más complejos del movimiento de la luna, como su Parada Mayor, que corresponde a un ciclo de 19 años, denominado Ciclo de Metón”, “La plataforma monumental de Segeda (de planta romboidal y con un espacio de 312 metros) es una obra del estado segedense, un calendario convertido en santuario, sin paralelos conocidos”, manifestaban estos investigadores encabezados por el director del proyecto el catedrático Francisco Burillo.

El lado mayor de la plataforma señala el azimút lunar conocido como Parada Mayor, fenómeno que se repite cada 19 años; el lado menor, el norte geográfico. La piedra angular situada en la confluencia de estos dos lados tiene 120º, pues bien trazando una proyección con un ángulo de 90º se alinea con el cerro de Valdehornos, por donde se pone el sol dos veces al año: equinoccio de primavera y de otoño. La bisectriz del ángulo se proyecta en el cerro de la Atalaya en cuya cima hay otro santuario y por donde se pone el sol en el solsticio de verano.

Antonio Envid

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Para quien tenga interés en este asunto
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