Camino del calvario. Pieter Brueghel. Museo Kunsthistorisches, Viena |
Para quien guste de la pintura y del cine, como es mi caso, tomará la película del director polaco Lech Majewski “El molino y la Cruz” como un regalo para la vista y para el espíritu. Basada en el conocido cuadro de Brueghel “El Viejo” que cuelga en uno de los museos de Viena “Camino del calvario”, el film es difícil de clasificar, porque no es una historia con base en el cuadro, ni tampoco un reportaje, ni una recreación histórica, y, sin embargo, es todo ello y algo más, un intento de introducirse en el cerebro del pintor para explicar su simbolismo, una reflexión sobre el dolor y el placer, el poder, la represión y la sumisión, el deseo de vivir por encima de tragedias y de males, en definitiva, sobre los parámetros básicos del alma humana.
Me informo de que el guion de la película está basado en un libro de Michael Francis Gibson con el mismo título que el film, donde este crítico de arte y escritor hace un minucioso y particular análisis del cuadro en el que Brueghel representó la pasión de Cristo trasladándola a la Holanda de su tiempo, momento en que la rebelión contra el Imperio español estallaba, con el ajusticiamiento del conde de Egmont y el almirante Philip de Montmorency, decapitados por orden de Felipe II. Los aproximadamente cien personajes que dicen que contiene el cuadro son campesinos holandeses que van al mercado y siguen con expectación el sacrificio, y según también se dice en el film, los soldados romanos han sido sustituidos por un contingente de tropas españolas.
Alguno de los símbolos es obvio, el molino encaramado en el alto picacho, no hay que ser un experto en simbología para ver que es una representación cristológica, las propias aspas son cruciformes, además, que por la molienda del grano, su sacrificio, se obtiene la harina con que se elaborará el pan eucarístico. Pero el director va más allá cuando comienza a desmenuzar símbolos y, sobre todo, cuando va presentando personajes del cuadro y nos los muestra en su vida cotidiana.
Una curiosidad de la película es que parece defender la tesis protestante de la justificación por la fe, ese principio según el cual el sacrificio de Cristo fue suficiente para salvarnos, sin necesidad de obras, ni especiales sacramentos, teoría muy disolvente para el stablishment, ya que toda la estructura de Roma sobraba, lo cual para un director polaco, país donde el catolicismo está tan arraigado, no deja de sorprenderme. También, el que presente a los españoles como fuerza represora contra los inocentes campesinos protestantes (nunca los campesinos han sido inocentes) simbolizada por esos soldados de extrañas casacas rojas que Brueghel representó y que nunca he visto en otro sitio. No digo que algún cuerpo especial las vistiera, pero son muy poco adecuadas para la guerra, es más, ni siquiera parecen de su tiempo, desde luego los feroces lansquenetes iban muy distintamente uniformados y la moda eran los uniformes las ajustados, con mangas abullonadas y calzas acuchilladas. Ya está uno al cabo de la calle de tanta leyenda negra, los rebeldes eran tan crueles como los represores, cada uno cuando podía, claro está.
Antonio Envid
Antonio,
ResponderEliminarSin pretencion alguna y según mis conocimientos de la época romana (que se sintetizan en Asterix-le Gaulois), me parece que la "toga" roja es propria del ejercito romano..el arte guerrero del aquel entonces era enseñar sus fuerzas, no disimularse (se puede ver el progreso en las guerrillas de hoy)
Por las otras interpretaciones, me rindo : no he visto la película ...
Un saludo desde aqui
Saludos, Bernardo (y espero volver a vernos pronto por aquí de nuevo). A parte de eso, estoy con don Antonio en que ya está uno un poco harto de tanta leyenda negra, en especial por lo que tiene de eso: de "leyenda". Que seguro que hay cosas ciertas, por supuesto, pero la tendencia a multiplicarlas, agravarlas y medirlas con la perspectiva actual, es fruto de una verdadera manipulación histórica.
ResponderEliminarUn abrazo a todos.
http://www.dailymotion.com/video/xn5i1c_bruegel-le-moulin-et-la-croix-bande-annonce-du-film_shortfilms?ralg=int.meta2-only#from=playrelon-3...Para dar movimiento a un cuadro...
ResponderEliminarlos comandantes romanos llevaban una capa roja, creo, pero las casacas con faldones de amplio vuelo que pinta Brueghel no me parece que sean de soldados mercenarios de los españoles como se asegura en la película. La cosa es importante, porque de ser así el cuadro representaría un nuevo sacrificio de Cristo, simbolizado, en este caso por las iglesias protestantes, a impulso de la Iglesia de Roma y los ejecutores los españoles, potencia dominadora. Puede ser que sea así. Antonio.
EliminarChé, don Bernad, una joyita ese enlace. En poco mas de un minuto, el cuadro en movimiento como bien dice.
EliminarChas gracias.
Srta. Dulce, amable y educá
Maestro
ResponderEliminarMe tengo que rendir a sus argumentos...Yo soy un espontaneo : me lanzo, sin capote ni manta y pronto me subo al olivo.De esa (falsa) bravura, Us esta en algo responsable y le agradezco de eso
"Hacer el ridículo no mata", dicen por aquí...
ps 1 :en el siglo 16, los opresores eran tanto españoles como austriacos por la culpa de un emperador nacido en Flandres...Asi que el color de sus trajes,nos importa un bledo (Trato de recuperar mi fallo)...
PS 2 : Solo le pido una cosa no llame a los flamencos "holandeses" : es una ofensa grave ... Bart DW de Flandres no lo soportaría ( Bart y Mas : misma lucha, mismo discurso...mismo populismo barato)...
Pero le digo : A +