Villamayor de Gállego 14 de junio de 2010
En esta trasnochada quiero hacer una reflexión sobre las opiniones y críticas de libros y cine que afloran por generación espontánea en periódicos y revistas. Y digo que afloran porque algunas parecen que cuentan e improvisan sobre la marcha y por si fuera poco con ningún criterio. Y es que dependiendo de la tendencia política del grupo editorial, la crítica va en una dirección o en otra; eso sí, cada vez más lejos del buen gusto y de la cultura. Este tipo de crítica, lejos de construir, destruye, arrasa y va dirigida a todos aquellos que se dejan llevar por la política y la moda del momento. Y como es una tendencia esporádica caduca al instante.
Estas críticas feroces tan faltas de buen gusto como de sensibilidad dan el punto de partida a la hora de descolgar películas de las carteleras y a la hora de vender centímetros y centímetros cúbicos de papel en las librerías. En esta sociedad, que huye del compromiso y vive en la superficialidad dejándose llevar por la cultura barata de la política, estos críticos demoledores se encuentran con un campo abonado.
Hace un par de trasnochadas colgué mi opinión sobre Baarìa, el film de Tornatore. Leyendo las críticas de esa prensa políticamente correcta he podido comprobar lo que estoy argumentando. Las críticas en España han sido demoledoras con Tornatore. ¿El motivo? Desde luego todo tiene una explicación.
No me considero una cinéfila, pero en mi humilde opinión Baarìa es una película magnífica, me atrevería a decir que es una obra maestra. Hay que tener muy poca, pero que muy poca sensibilidad para escribir las críticas que se han vertido contra Tornatore. En Baarìa he podido encontrar reminiscencias de Visconti, de Francesco Rosi, de Bertolucci… De todos los grandes que han sabido hacer cine. Yo no sé qué han podido ver todos esos críticos que ponen a caldo la película, que por si fuera poco se meten hasta con la banda sonora de Morricone, calificándola de empalagosa. Claro que… lo que justifica todo es el gusto y sobre gustos no hay nada escrito. Por mi parte, salvo en esta barricada y cuando me lo piden, cada vez opino menos sobre cine, arte o literatura. Estoy resignada a oír la defensa de esos que se tildan de intelectuales y califican El Código da Vinci como una buena novela, o de esos otros que ven una historia cotidiana en la chica del bidón con gasolina. Antes cuando opinaba, todos concluían diciendo que sobre gustos no hay nada escrito y que mi opinión no dejaba de ser una más, tan respetable como todas las demás. Entonces era cuando me daba un ramalazo de soberbia y contestaba que sobre gustos no hay nada escrito y que entre lo bueno y lo malo hay un trecho; a continuación paso a paso desmontaba la historia del Código da Vinci. Qué le pasaba a mi interlocutor. Muy sencillo, se quedaba sin argumentos. Pero si vamos al fondo de la cuestión qué es lo que más gusta del Código Da Vinci. Pues lo que más gusta es que el malo, el asesino sea del Opus, que la novela vaya contra el Papa y las altas esferas vaticanas, es decir, que es una novela políticamente correcta con los tiempos que corren.
¿Qué es lo que no ha gustado de Tornatore? Pues lo que no ha gustado de Baarìa ha sido su productora: Medusa. ¿Quién está detrás de Medusa? Berlusconi. Ese ha sido el fallo de Baarìa, que es políticamente incorrecta. En esta barricada estamos todos, yo creo, hartos de lo políticamente correcto. Y estamos tan hartos que cada vez nos desmarcamos más.
Todos estos críticos que son capaces de vender su alma al periódico para el que trabajan, aparte de no tener sensibilidad, deberían estar retirados de la circulación por ser el mejor ejemplo de incultura.
Y bueno… Dejo aquí mi trasnochada y mi opinión. El debate queda abierto.
El Código da Vinci y la Chica de la Gasolina tienen en común una trama muy pero que muy enrevesada. Yo creo que esto es propio de las novelas escritas por escritores con pocos recursos literarios pero, quizás, con un tipo de imaginación...no sabría como calificarla:..selectiva quizás.
ResponderEliminarY, bueno, te confieso que yo he leído la trilogía de la chica de la gasolina y el Código y muchas otras novelas basura, así que puedo opinar.
Confieso que creo que leer esto es una pérdida de tiempo y que así lo siento, pero una vez que empiezo, la trama me obliga a llegar al final, ¿será una adicción?
En mi descargo debo decir que también leo novelas de verdad, ahora mismo, los Hermanos Karamazov.
Comprendo, me doy cuenta de que es posible escribir una trama interesante y profunda y además hacerlo con maestría. Pero la maestría a veces conlleva ser capaz de escribir un argumento complicado y hacerlo de forma literaria. Y esto, no está al alcance de muy pocos autores. -creo-
Por cierto, ¿podrías recomendarme alguna novela de un escritor vivo que merezca la pena?
Sobre los críticos...en mi caso, desconfío de las críticas tanto buenas como malas. Si conozco a la persona que las emite, es posible que las tenga en cuenta, pero, como tú bien dices, hoy en día casi nadie sabe hacer una crítica con algo de fundamento.
Salud!!
Vladimira
Eso de que sobre gustos no hay nada escrito no deja de ser un lugar común que, como todo lugar común, si se piensa bien... Los catadores de vino no concluyen sobre su bondad sino sobre su calidad. Sobre la calidad sí que hay mucho escrito. Las famosas poéticas de Aristóteles y de Horacio, prescribían reglas para armar bien una sólida narración. La conclusión, así, rápida y a vuela pluma, es que sobre la calidad sí que se puede escribir y que, normalmente, lo que contiene calidad, resulta bello, hermoso, bueno.
ResponderEliminarY sobre la calidad sí que hay normas, cánones. En definitiva creo que se podría decir que puede haber calidad sin belleza (o almenos, la belleza opinable, no la calidad) pero lo que creo que resulta imposible es que pueda haber belleza sin calidad.
¿Y los parámetros por los que se mide la calidad? Son esas normas, que pueden encontrarse, por ejemplo, en las poéticas comentadas. De todos modos sobre belleza y sobre arte hay, lógicamente, mucho escrito: desde Kant, Lessing o Schopenhauer.
Harold Bloom (crítico literario) tiene escrito un estudio muy interesante que, precisamente, se titula: "El canon occidental".
Por lo tanto eso de que sobre gustos... Hay cosas que son -al menos desde nuestros cánones- objetivamente feas, con independencia de su éxito (lamentablemente fealdad y éxito van cada vez más unidas en las sociedades empobrecidas, como lo es la actual; empobrecidas desde los cánones por los que esas sociedades han venido rigiéndose inveteradamente). (Joder qué rollo me ha salido): He dicho.
Servando, has estadado soberbio, bueno, brutal.
ResponderEliminarEn cuanto a lo que me pide Vladimira de novelas escritas por escritores vivos, bueno, no sé si habrás leído algo de Eduardo Mendoza, en cuyo caso te recomendaría: La verdad sobre el caso Savolta, La ciudad de los prodigios.
Mañana en la batalla piensa en mí o Corazón tan blanco de Javier Marías, también me parecen unas novelas completas.
En el panorama actual de librerias no hay nada que merezca la pena, que aporte algo. Porque ni La sombra del viento ni otras cosas por estilo entran dentro de mis parámetos de buenas novelas. Y aunque las novelas que te cito llevan ya unos cuantos años publicadas, te puedo decir que tienen todos los ingredientes de una buena novela. Otro autor que me gusta mucho es Juan Marsé.
Una pregunta para Vladimira: ¿De los hermanos Karamazov con cuál de ellos te quedas? Quiero decir, si te identificas o te compadeces de alguno de ellos.
Gracias por vuestros comentarios.
María Jesús
Lasnovelas que mencionas, ya las he leído, ¿se te ocurre alguna más?
ResponderEliminarDe los Hermanos, de momento no mesiento identificada con ninguno ya que acabo de empezar e intuyo que ninguno va a ser lo que parece.
Por ejemplo, Mitia, parece una persona mística y dócil, sin embargo, cuando lo describen resulta ser un ser vigoroso...creo que nadie eslo que parece.
Pero me guardo la pregunta y en cuanto lo tenga claro te lo digo.
Gracias,
Vladimira
¡Ah, Vladimirita! Verás que, sin duda, al final quedarás prendada de Dimitri Karamazov. Él es todo pasión, es igualito a su padre... solo que buena gente.
ResponderEliminarYul Brynner encarnó en el cine a Dimitri K., y no pudieron escoger mejor.
Srta. Dimitrova
Respondiendo a Vladimira sobre la narrativa viva.
ResponderEliminarYo hace tiempo que me he retirado del panorama actual: no me gusta nada y me parece una pérdida de tiempo y dinero. Por otra parte me he pasado a la narrativa italiana y me dejo más dinero en libros allí que aquí.
En nuestro país tenemos buenos autores que dan la talla como Manuel Rivas. Otro que gusta mucho es Lorenzo Silva, auqnue yo personalmente no lo he leído. Manuel Rivas escribe muy bien, muy bien. Josefina Aldecoa también me gusta, Ana María Matute, Sánchez Ferlosio... Estos ya tienen sus años, pero es triste y deprimente el panorama actual.Para mí escribir bien es lo más importante y este ejercicio en el presente deja mucho que desear, son cuentistas sin trasfondo.
A quién he leído y me gusta es a Catherine Clément: Por amor a la Inida, El vals inacabado.
De quien me leo todo y en Italia es un fenómeno con las aventuras del comisario Montalbano es Andrea Camilleri, aquí en España hay mucho traducido y en edición de bolsillo puedes encontrar gran parte de su obra.
Otra novela que me ha gustado mucho, la he leído en italiano; pero sé que está traducida al español es La larga vida de Mariana Ucría de Dacia Maraini.
Bueno, Vladimira, espero que te sirvan de algo estas líneas. Yo actualmente me estoy leyendo Las confesiones de un italiano de Ippolito Nievo: un tocho de mil cien páginas en letra pequeña.
María Jesús Mayoral
María Jesús,
ResponderEliminarDe Lorenzo Silva, he leído varias novelas de la saga del sargento Bevilacqua. encunetro en él un regustillo a Carvalho y me hace reir muchísimo. Me encanta. en la última: la estrategia del agua lasconversaciones con Chamorro son muy interesantes.
Los libros de silva, los he regalado a personas que no leen demasiado -o si lo hacen son las novelas Vinci y Gasolina-.
Y he conseguido que se interesen por ese tipo de novelas mejor escritas.
Por supuesto que Josefina Aldecoa y Ana María Matute son autoras que me encantan y a las que he leído asiduamente.
El próximo libroque compre va a ser de alguno de los que me nombras y no he leído. Seguro.
Muchísimas gracias,
Vladimira