-
La cosa más sublime,
el cuadro más hermoso
que he visto en este mundo
ni puedo ver en otro,
fue el techo de tu alcoba
reflejado en el fondo de tus
ojos
José María Bartrina. “Íntimas”
Engañoso
espejo en el techo de tu alcoba. Visión de un mundo en su redonda plenitud. Inaprensible mundo femenino. El
cuadro más sublime, el cuadro más hermoso, que he visto en este mundo, ni puedo
ver en otro. Reflejos de carne gloriosa en su triunfante desnudez. Tu cóncavo vientre en anhelante espera. Danae recibiendo la dorada lluvia del
potente dios en su seno. We
skipped the light fandango with your shade of pale. Procol Harum
espectrales se abren paso por entre los espesos
cortinajes de la fiebre para hollar la
plácida alfombra de la noche. Suaves
curvas por donde el deseo se desliza frenético buscando el pozo de aguas
profundas para sumergirse en la agonía de la pequeña muerte. Tus ojos, estanques
de peligrosas aguas, vértigo del deseo, donde la placidez esconde el peligro de
sus vórtices. El techo de tu alcoba reflejado en el fondo de tus ojos. Torpe
afán detenido en el tramposo juego de espejos.
Antonio
Envid
¿este Bartrina, que no se llamaba José María, sino Joaquín, no es aquel que dijo:
ResponderEliminarsi quieres ser feliz, como me dices,
muchacho, no analices, no analices ?
Debía ser ingenioso por demás, pues también es suyo:
Hace ya veinticuatro años
que vivo solo conmigo
y hace cuatro que deseo
divorciarme de mí mismo.
mejor que Groucho Marx
Hay un José María Bartrina y un Joaquín Bartrina
ResponderEliminarDudo mucho que Antonio haya confundido el uno con el otro
En todo caso, me imagino que él (cuando pueda)si lo cree necesario nos lo aclarara
Gracias
Tiene razón el anónimo comunicante, lo que demuestra la gran calidad de los seguidores del blogg, el poema es el XIV de "Algo" de Joaquín María Bartrina. Queda aclarado.
ResponderEliminar