Villamayor de Gállego, 11 de enero de 2011
En esta trasnochada, después de bien pasadas las fiestas, quiero recordar el especial de Nochebuena que nos ofreció TVE. Resulta curioso que Raphael se haya convertido en el cantante de todos los Regímenes: eso es saber nadar y guardar la ropa. Estuvo como estrella en la España de Franco y sigue siendo estrella, algo más apagada, en la España del Rey. Raphael se ha convertido en un clásico navideño que cada año me chirría un poco más. Y es que ha perdido voz, clase y estilo. Cuando un artista es joven y canta bien se le permite todo, hasta ser soso en el escenario: esto ha sido en Raphael una constante. Leyendo este párrafo cualquiera puede pensar que estoy siendo cruel con un cantante que no está en plena forma; no es esa mi intención. Uno mismo debería ser consciente de sus limitaciones y si uno no lo es, se lo deberían insinuar los de alrededor. Otro caso es el del gran cantante que fue y que ahora no es sombra de lo que era: Camilo Sesto. No pretendo cargar contra ellos, porque reconozco que han sido grandes cantantes y no es mi intención quitarles el mérito. Todo esto me viene a la memoria en esta trasnochada, porque Camilo Sesto también tuvo un especial en Nochebuena y claro, fue mucho para una sola noche: demasiado cantante decrépito en una sola sesión. Recordando las actuaciones estelares de Raphael ante la señora de Franco y aquella interpretación que hizo Camilo Sesto de Jesucristo Superstar en un programa de José María Iñigo, y viendo en la noche del 24 de diciembre el estado actual de los mismos, me dije: el paso del tiempo puede limitar y de hecho limita, pero hay casos y casos.
En este espacio me gusta sincerarme, dejar por escrito lo que pienso. Me da rabia este país, siempre apostando por lo decrépito, siempre debiendo y haciendo favores a los amigos de turno. Así no vamos a ninguna parte. ¿Por qué no se apuesta por los artistas? Y cuando digo artistas, me refiero a gente con arte y no a toda esta cuadrilla de “mataos” que dan la tabarra, que los promocionan sin valer un pimiento y no llegan a hacer una carrera artística en condiciones porque se van quedando por el camino. Claro, así estamos, cuando hay que echar manos de artistas no queda más remedio que tirar de las viejas glorias. Y todavía me da más rabia cuando pienso en Italia y todos los años veo a las viejas glorias italianas en plenitud de facultades vocales. Increíble ver Gianni Morandi dirigiendo sus programas de televisión, cantando con sus amigos. Qué decir de Massimo Ranieri, querido y aclamado, cantando en un programa especial que hace la RAI para los niños. De Albano, mejor ni hablar. Como dice Morandi: Albano masacra con su voz a todos los cantantes italianos. Estoy hablando de cantantes que están alrededor y hasta sobrepasan los sesenta años.
Las comparaciones son odiosas y tediosas, pero me gusta hacerlas. Italia es un país de artistas incombustibles, de hecho siguen en la brecha, quizá no con la fuerza de la juventud; pero siguen emocionando al público. Y todo esto me hace pensar que en España no hay artistas, sólo productos que se usan y se tiran. Las grandes glorias de la canción española están desgastadas y se les mantiene, tal vez porque no haya nada mejor. Para pensar.
Y bueno, para rematar, os recomendaría que vieseis en Youtube la actuación de Raphael con Rita Pavone interpretando la canción de Alaska “¿A quién le importa?”.
La verdad, después de su crítica me esperaba algo peor. Ni que decir tiene que estos dos cantantes no están a la altura artistica de lo que lo estuvieron ( no por ellos mismos, sino por el momento en el que surgieron), pero creo que simplemente intentan transmitir un mensaje a una generación, a la vez que conectan con las inquietudes de otros artistas.
ResponderEliminarNo suelo ver la televisión, porque cada vez me gusta menos, pero hay una cosa que me llama mucho la atención de esta empresa...y es que siempre cuentan con todos sus trabajadores.
Aprende Alaska de La Pavone, pequeñita como tú pero con más gracia,con sentido del ritmo y mejor voz. Esta versión supera al original.
ResponderEliminarMe ha encantado el video. Muy bien, genial, Servando.
Azulenca.
Ya he dicho en el artículo que no quería cargar las tintas, entre otras cosas, porque a mí curiosamente me gustan los dos cantantes: como cantan. Aunque en el caso de Camilo Sesto es un tanto extraño que me guste ahora y que no me gustase en su época de éxito. No es otra cosa nostalgia. Pero lo cierto es que ver las actuaciones de Nochebuena me dio pena. Y bueno... cuando uno no puede dar más de sí, es mejor una retirada y dar paso a otras generaciones.
ResponderEliminarMaría Jesús
Sí, la verdad es que parecía que ibas a mostrarte cruel con ellos y no ha habido sangre. Mejor, siempre es mejor que no la haya. De todos modos dan mucha penica. El Camilo más, porque parece una versión mala de aquel -otro pobre- negrito americano que quería ser blanco...
ResponderEliminar(yo vi algún corte, más del Camilo que del Ralph, y jooo... Sin embargo no ha mucho vi al Ralph en un programa en directo cantando algunas canciones antiguas -las que le componía Manuel Alejandro, la mejor época- y, la verdad, me pareció que aún estaba en forma).
De todos modos lo de la nostalgia es muy importante: canciones que en los 70 no soportaba, ahora me encanta oirlas. Sé que son horribles -musicalmente- pero tienen el efecto de la magdalena de Proust: me trasladan. Entonces, oigo -últimamente algo menos- cancioncillas de aquellas y me encantan (curiosamente muchas de las que entonces me gustaban ahora la encuentro malísimas también, pero bueno, eso: el efecto... proust).
Azulenca, conste que la idea de insertar el vídeo no ha sido mía sino de la propia María Jesús, la autora de la trasnochada que, por cierto, ha sido más cruel con la elección del vídeo que con el texto. El vídeo, no hay que perdérselo, muestra unas "bicicletas" de ambos (la Pavone y el Ralph) que ni Ronaldo... (le llamo Ralph desde que versioneó Aquarios)
Besos.
Pues a mí este video me encanta. Veo a una Pavone eternamente joven, aunque el video tiene ya unos añitos, lo cierto es que le veo un toque rockero que le va y la canción la borda.
ResponderEliminarDecir que esta canción de Alaska me gustó mucho en su época y me sigue gustando. Y lo que más me gusta de la canción es la letra. Me pasa lo mismo cuando escucho cualquier versión de A mi manera. Por supuesto la mejor es la de Sinatra.
María Jesús
Si es cierto que Rafael, Camilo etc. están un poco decrépitos pero siempre tienen sus fans porque en su día cantaban bien y si llegaron a ser famosos es porque en aquel momento eran los "buenos", por eso yo, tanto si me gusta o no el tipo de canción que interpretan los respeto, porque es su modo de ganarse la vida, lo que si me parece "indecente" es que hoy se subvencione a un señor o señora que no vale un pepino y no sabe sacarse las castañas del fuego y el "Papá Gobierno" los protege y alimenta como a cachorros ¡A costa de todos, claro está! y digo yo ¿Por qué no se dedican a otra cosa y no tenemos que pagar todos a esas personas que no pisan un escenario o no sacan un disco nuevo desde hace décadas?
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