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Políticos y directivos
de las grandes compañías han sometido a las arcas públicas y privadas españolas
a una sistemática e inmensa devastación. En muchas ocasiones no es tan grave,
con serlo, el latrocinio sufrido como el daño irreparable causado a nuestra
estructura económica, llevándola al colapso financiero o la debilidad extrema
de nuestro sector energético. De este último asunto, el energético, se habla
muy poco.
El sector energético
de un país es fundamental para su actividad económica, máxime cuando cuenta con
escasos recursos de energía como el nuestro. La salud de este sistema en
economía es tan importante como la del corazón y el aparato sanguíneo en una
persona. De modo que todos los países desarrollados consideran estratégico
a su sistema energético, no permitiendo en él injerencias de países extranjeros,
y cuando no, las rodean de autorizaciones y limitaciones que protejan su
soberanía en esta materia.
Las más importantes
compañías eléctricas españolas están hoy en manos de extranjeros. En pocos
lustros un sector netamente nacional ha sido malvendido, entregado a compañías
e intereses foráneos.
La antigua
Hidrocantábrico se halla hoy controlada por China, gracias a la rocambolesca
venta de esta compañía a la portuguesa HC Energía, que acaba de revenderla, en
una suculenta operación, a la china Three Gorges Corporation.
La otrora potente
ENDESA es sabido como cayó en manos de la italiana ENEL, gracias a la torpeza
(¿solo torpeza?) de Zapatero y su nefasto ministro de industria y energía
Miguel Sebastián. Como este país es muy olvidadizo, recordemos como todo
ello fue consecuencia del apoyo que prestó el gobierno Zapatero a Gas Natural
para lanzar una OPA sobre Endesa. Pizarro contraatacó aliándose con E.ON, (que
al fin es alemana y ofrece bastante confianza), entonces el Gobierno español
propició la compra por ENEL y Acciona (esta última se embolsó más de 1.800
millones en la operación).
Pues bueno, la
italiana ENEL se encuentra en un auténtico caos financiero y según un
confidencial: Después de las
turbulencias que han vapuleado a Endesa en los últimos cuatro años el panorama
es desalentador. Estrangulada por sus dueños y sin apenas inversiones, sería la
ex empresa española la que correría con el saneamiento de Enel, que actualmente
tiene una deuda de 51.000 millones de euros. Todo hace suponer que la
liquidación de esa deuda correrá a cargo de la rentable Endesa, modelo de
gestión durante muchos años. Como primer y más temido efecto secundario, podría
producirse un impresionante recorte de personal que afectaría a la plantilla
española y no, naturalmente, a la italiana.
Como consecuencia de
esta venta a los italianos ENDESA se troceó y E.ON se ha hecho con Electra del
Viesgo.
¿Qué ocurrirá con
REPSOL? Nada quiero aventurar, pero esta compañía, que parece que acaba de
encontrar importantes recursos petrolíferos en Argentina, es como una caja de
bombones en la puerta de un colegio. REPSOL es codiciada por cualquiera de las
grandes corporaciones que forman el cártel petrolífero y es tremendamente
vulnerable, ya que el accionista más significativo, con un 20% del capital, era
hasta hace unos días SACYR, que se halla inmersa en el marasmo económico del
sector inmobiliario, y además compró esta participación con un fabuloso
préstamo de 4.900 millones, que está muy lejos de poder devolver; el siguiente
socio es la mejicana PEMEX, con un 10% del capital. Esto es, no existe un
núcleo duro en la estructura de capital de la compañía. Ha habido serios
asaltos por parte de los rusos para hacerse con esta compañía esencial para el
sector energético español, que en el pasado fueron propiciadas por el rey Juan
Carlos (?) que abogó por la rusa Lukoil.
Hace unos días se ha
conocido que la propia REPSOL ha comprado a SACYR, ante los problemas
financieros de ésta, la mitad del paquete de acciones que tenía, de modo que ha
adquirido sus propias acciones con lo que estará buscando un comprador para
ellas, de lo contario su estructura financiera estará dañada. Veremos quien
aterriza.
Sobre las energías
alternativas, más vale no entrar, porque el cabreo puede dañar nuestra salud.
Resulta que hemos estado pagando un pastón por la energía eólica y viendo como
se hacían ricos los especuladores con las concesiones administrativas de su
instalación y va Gamesa a China y le exigen que todos los molinos se fabriquen
en China, con lo que la tecnología conseguida en España le es cedida al gigante
amarillo. Con los huertos solares ha pasado lo mismo, fuerte especulación con
las concesiones, compra de la energía producida a cinco veces el precio de
mercado e importación de todas las cédulas fotovoltaicas, elemento básico, de EE.UU., tecnología y valor añadido
españoles: nulos.
No duden ustedes que
detrás de todas estas operaciones hay bastante más que torpeza, pero sus
funestas consecuencias para todo el país se irán viendo.
Armando Bulla
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