miércoles, 16 de febrero de 2011

EN LA TRASNOCHADA, 42 (María Jesús Mayoral)



Villamayor de Gállego, 14 de febrero de 2011

En la trasnochada cerrando los ojos sigo viendo esa alfombra roja salpicada de actrices, modelos y modelitos en la vigésima quinta edición de los Goya. Personalmente no me gusta la ceremonia de los Premios Goya, ni siquiera me gusta que hayan puesto por trofeo la cabeza del insigne y genial pintor aragonés. Qué no diría él al verse entre las manos de según quien; sobre todo cuando lo cogen del cuello para elevarlo al cielo como si el premiado hubiese ganado una copa jugando a la petanca.

Este año ha sido una edición especial gracias a la Ley Sinde, con más expectación ante la renuncia del Presidente de la Academia de Cine Española. El recibimiento a la Ministra fue apoteósico: internautas furibundos fueron los encargados de darle la bienvenida, a ella y al resto de los artistas. Artistas se denominan ellos, porque en mi opinión, en España artistas con mayúsculas van quedando pocos. Debo sincerarme y decir que me niego a ver cine español: yo no pago dos veces la misma película, ya tienen más que suficiente con la subvención que reciben de Cultura como para encima pagar por una entrada de cine. Un cine español que cada año baja más en audiencia. Bueno, si reciben subvenciones estaría bien que dejasen ver gratuitamente esas películas españolas. O al menos que oferten las entradas a mitad de precio, yo creo que sería una solución más justa.

Aparte de no pagar una película española dos veces, debo añadir que hace tiempo que dejé ver cine español; aunque reconozco que hay notables excepciones que se salvan. Tengo mis motivos. Encuentro al cine español repetitivo, con los viejos temas de siempre: República, Guerra Civil, Dictadura, rojos, fachas, curas, hijos de curas, marginación, historietas sacadas de la Historia y de su contexto, mujeres maltratadas… Temas que aburren y confunden; si a ello le añadimos ciertas interpretaciones, es ya para morirse de asco. Hay una cosa que se llama interpretación, existe la dicción, la declamación y hasta la respiración. Algunos de esos que se proclaman artistas deberían aprender a hablar, se tragan las palabras, las ahogan; cuando gesticulan lo hacen con tal afectación que acaban matando la espontaneidad. Y es que no se puede hacer un cine serio donde los artistas están relacionados familiarmente con los productores o los directores de cine, gente que no ha tomado una lección de interpretación; y si las han tomado ha sido sin aprovechamiento.

Esta es sólo mi humilde opinión, pero las cifras de audiencia del cine español están ahí. En lugar de tanta ceremonia, tanto felpudo rojo que no alfombra, tanto modelito, tanta pose; mejor sería hacer de vez en cuando una buena película que se catapultara a nivel internacional, mejor sería hacer una gala de los Goya más dinámica, más divertida, sin tanto agradecimiento a progenitores con lágrima incluida. Pero para hacer todo eso se necesitan pedazos de artistas, directores como la copa de un pino y showmans de lujo. ¿Con cuántos podemos contar? ¿Con Buenafuente o la Sardá, quizá? En España carecemos en estos momentos de gente con talento, estamos en punto muerto. El mundo de la cultura está al servicio de la política, de una política y así no vamos a ninguna parte. Por otra parte están los que ponen la pasta y descubren talentos; pero para qué van a descubrir talentos si venden el producto en función del apellido. Al producto se le pone la cara de un famoso y ya está vendido.

En esta Trasnochada entre tanta fotografía de los Goya me quedó con una en especial, en ella están los cinco magníficos: la minista Pajín, la ministra Sinde, Alex de la Iglesia cineasta y todavía Presidente de la Academia de Cine, la ministra Salgado, y el ministro Sebastián. Posan todos de etiqueta, luciendo modelito que no clase. Yo creo que darían más juego para una charanga. Después de todo esto que he soltado, dormiré mucho mejor.

8 comentarios:

  1. Cómo se hace una película española:
    "Oye, que hnn salido las subvenciones. Nos juntamos la panda de siempre y presentamos el proyecto. ¿Guión? qué más da, algo tendrás por el cajón. Oye, de cobrar ya sabes, diselo a todos, cuando se reciba la subvención"
    Después el tormento de las salas: la cuota de pantalla. Y a por otra...

    De tarde en tarde sale alguién honrado, Iciar Bollaín, con talento, con ideas y arriesgando: "También la Lluvia"

    ResponderEliminar
  2. Y luego se lleva los Goya una película que sólo se puede ver en media España y que sólo la han visto 60.000 espectadores.

    María Jesús

    ResponderEliminar
  3. Estoy completamente de acuerdo, en el 90% de los casos, el cine español es un prolongación de la guerra civil con retoques, generalmente, de muy mal gusto y digo ésto porque los que, afortunadamente, no hemos vivido en aquella época, tengo la impresión de que nos quieren aborregar y lavar el cerebro ¿No sería mejor que el cine fuera cine y la política, política? (Aquí vendria bien la frase de "zapatero a tus zapatos..."). Se me ocurre un ejemplo ¿Qué pasaría si a los alemanes les machacaran con películas de Hitler, judios y campos de concentración? En primer lugar ni me lo imagino porque los considero bastante inteligentes, pero si eso ocurriera, directores, actores y actrices estarían en la fila del "paro", claro que en España, que verdaderamente es diferente, muchísimos/as de esos/as individuos/as no saben lo que es trabajar de verdad y tampoco lo que es el paro, sino ya espabilarían.

    ResponderEliminar
  4. A mí lo que más me sorprende de nuestra "Academia" es que está repleta de antiyanquis que sólo hacen imitar en lo más lujoso y asqueroso a esos yanquis que critican: toman de ellos lo peor: las ceremonias, el glamour y hasta degradan al pobre Goya como el tío Oscar.

    Sin embargo, aquello es un negocio privado que funciona, mientras que lo de aquí es un negocio público ruinoso. ´

    Y lo de Iciar Boyain, querido Antonio, sólo he visto algún trailer, pero me da la impresión (por lo que he visto) que vuelve a tratar NUESTRAS VERGÜENZAS con América. Y, digo yo, que ya vale, vamos, digo yo (precisamente sacaste ayer a colación lo de hispanos y latinos), bueno pues ya vale: tenemos nuestra historia con luces y sombras. Llevamos desde unos años antes a la celebración del centenario dedicándonos sólo a las sombras. Pero es que, además, muchas de estas sombras son FALSAS. Se mire como se miré allí había salvajes caciques en taparrabos que hacían sacrificios humanos. Nosotros les llevamos una religión muy superior, unas costumbres más avanzadas y, además, nos mezclamos con ellos. Ah, y allí se forjó, el Derecho Internacional (Francisco de Vitoria, Bartolomé de las Casas, etc. qué cosas, de esto -casualmente nunca se habla, la gente no tiene ni puta idea).

    Bueno, pues eso.

    ResponderEliminar
  5. Estoy contigo Servando en lo de tratar nuestras vergüenzas. Los directores españoles cuando hacen cine basándose en nuestra historia la destrozan: a la hora de desmitificar gestas son geniales.

    María Jesús

    ResponderEliminar
  6. Servando, ve a ver primero la película, que no trata de nada de eso.

    ResponderEliminar
  7. Anónimo, ya digo en mi comentario que no la he visto. Sólo he visto algún trailer con torturas a indios y una niña -india/americana- actual viendo la película en la que ella misma trabaja (algo así como la propia Iciar en El Sur -perlícula que me encanta, a pesar de que su director, Victor Erice quiso cagarla-).

    Bien, admito, el comentario de quien la haya visto, evidentemetne. Pero, coño, siempre nos venden lo mismo (a mí eso es lo que me ha llegado).

    Si además, voy a una noticia de El País sobre la película, así, al azar, mira qué dice (entre otras cosas, claro):

    "También la lluvia es una película dentro de una película. Narra el rodaje en Bolivia de un filme de época en torno al mito de Cristóbal Colón, un hombre obsesionado por el oro, cazador de esclavos y represor de indios".

    Si, al final aquí, el caldo de cultivo que se ha creado es este, y esto es lo que "vende" (políticamente, claro, no comercialmente, que no venden ni un duro).

    De todos modos, me comprometo a verla y rectificar mi opinión si es necesario (además, a mí, la Bollain me cae bien porque siempre la identifico con el "Estrella", la muchacha encantadora de El Sur).

    Saludos y gracias por la información.

    ResponderEliminar
  8. Más, por favor, ver el trailer: ponen en igualdad la represión de los dictadores pleno siglo XX o XXI con los conquistadores/descubridores de finales del XV en nombre de la cruz. Cruz y muerte (o infamia o tortura) son dos imágenes que presiden el trailer. Eso es un mensaje, digo yo.

    Vamos, al menos eso se ve aquí:

    http://www.youtube.com/watch?v=FaiuQX1epts

    Y eso es, por lo demás, coincide con lo que decía El País en la reseña que he pegado en el comentario anterior (a ver: en la sinopsis dicen que "el chico" quiere hacer -parece ser- una película pura, de denuncia -Colón era un hijoputa-; la chica, más práctica, quiere hacer una película ajustada al presupuesto. Bien, me pregunto: en la película el chico parece ser el bueno: el artista que denuncia a la historia y a los malvados...).

    No sé, no sé... Tengo ganas de verla (desde luego no pienso pagar ni un duro, la bajare gratis, vaya por delante).

    Ojo, y yo no niego barbaridades. Lo que digo es que llevamos desde unos años antes a 1992 centrados en exclusiva en tales barbaridades. Y eso es exagerado y como exagerado FALSO. Y digo: las hubo, seguro. Pero hubo muchas, muchas, muchas cosas buenas y positivas. En nuestra Historia como en la del resto del mundo hay sombras y luces. Faltaría más.

    Saludos.

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...